Nueva entrada del Blog de Roberto Luna
<<...Con el coaching auténtico, hacemos lo que decimos y nos aproximamos tanto como podemos en el día a día. La constancia en la búsqueda de nuestros ideales es diaria, requiere esfuerzo y conciencia. Y por eso, necesita alimentarse continuamente. El coach puede ayudarle mediante su figura externa a hacer frente a sus ideales y a convertirlos en ideas más cercanas a usted. Al fin y al cabo él no hará nada especial más que acercarle a usted mismo. Ese del que a veces nos alejamos tanto. El coach es un espejo de su idealidad o realidad, es un reflejo de usted. El coach es el espejo, el coachee o profesional pone el contenido y la actitud. La acción es del profesional, el coach establece entornos y da información según la percibe. Sin juicios, sin manipulaciones. Sencillamente pone encima de la mesa lo que percibe con respeto. De ahí proviene su fuerza y potencia, es el profesional quien se hace responsable de sus decisiones y cambios..>>